miércoles, 30 de junio de 2010

¿Por qué los gansos vuelan en V?




 I Samuel 16:18
“Entonces uno de los criados respondió, diciendo: He aquí yo he visto a un hijo de Isaí de Beth-lehem, que sabe tocar, y es valiente y vigoroso, y hombre de guerra, prudente en sus palabras, y hermoso, y Jehová es con él.”

Esta noche te traigo una reflexión y le he puesto por título Por qué los gansos vuelan en v?
Cada aleteo que emiten levanta una ráfaga de viento beneficiosa para el que está a su lado. Es decir, que con su aleteo otros se benefician y permite que avancen.
Los gansos también emiten un sonido que alienta a la avanzada, de manera que los gansos están sirviéndose unos a otros.
¿Qué significa servir? Ser esclavo, pertenecer  totalmente a su amo. Estar obligado  a servir y ministrar.
Nosotros, ¿de quién somos siervos, a quién servimos?
Cuando estábamos en el mundo éramos siervos del pecado, de diferentes  formas de vicios: alcoholismo, drogadicción y diferentes “placeres” que brinda el mundo.
Ahora  somos siervos de justicia. ¡Siervos de Jesús! Amén.
Cuando leemos las epístolas nos percatamos que muchas inician: ‘Yo siervo de Jesucristo.
‘Yo siervo del Señor.’
 ¿Por qué? Porque él fue primero siervo. El pagó un precio de sangre. Él se humilló. Él se despojó de toda su gloria para servir en la tierra.
Quiero recordarles algo hermanos: El que sirve es el más grande.
Nosotros somos siervos de Dios.
Recuerdo que en una ocasión el pastor dijo en una predicación:
“Los siervos de Dios al principio son invisibles. No aplaudidos. El carácter se forma con el anonimato. Los que lo aceptan son más capacitados para manejar el aplauso de la popularidad.”
Cuando Dios va a empezar a formarte ese carácter de siervo tienes que comenzar primero por lo poco. Tienes que comenzar por distintas circunstancias. Dios recompensará en público a quienes desde el anonimato le sirven.
Debemos servirle a Dios, por gracia, porque todas las cosas que hizo para nosotros.
Te invito a que busques Apocalipsis 1:1.
“La revelación de Jesucristo, que Dios le dio, para manifestar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto; y la declaró enviándola por medio de su ángel a su siervo Juan.”
¿A quién Jesucristo revela sus cosas? A sus siervos, a quienes servían al Señor, no a quienes estaban estáticos, perplejos.
Nosotros no podemos estar hieráticos. Debemos tratar de avanzar a diario un peldaño.
¿Cómo servir a Dios?
Primero manteniendo la unidad del cuerpo de Cristo.
Yo pongo el ejemplo del cuerpo humano. El ojo no hace la misma función que un brazo, ni una pierna. Cada una tiene su función.
Lo primero que debemos hacer es identificarlo, ¿quién soy?, ¿en qué estoy mejor preparado?
Cuando estaba más pequeña yo me decía. Voy a ser una evangelista, y cuando le ponga la mano a las personas caerán y recibirán sanidad en el nombre de Jesús.
Pero el Señor me dijo: No, tú no vas a ser evangelista. Tú vas a ministrar la alabanza.  Eso era una lucha entre el Señor  yo. Un capricho mío.
Me mandaban a cantar y a mí no me gustaba para nada. Una tarde el pastor fue a mi casa y me dijo: Dice el Señor que en esta hora está poniendo un ministerio de alabanza en Tus manos.
Entonces me dije: Bueno Señor, no es lo que yo quiera, sino tú. Y comprendí que no es lo que a veces nos gusta, es a lo que Dios nos ha llamado. Para eso dice que los constituyó a unos profetas, pastores, maestros, músicos.
Recuerda. Cada miembro en el cuerpo de Cristo tiene una función importante. Cada miembro cuenta.
Cuando dios nos da los dones no es para hacer como el hombre de los talentos, guardarlos, esconderlos. ¡No hermano! Debemos aplicarlos y ponerlos en práctica para otros.
¿Qué son los dones?
Las habilidades específicas que milagrosamente  por gracia Dios da a cada cristiano por medio del Espíritu Santo para beneficio de otros cristianos en la iglesia.
Cuando llenas tu odre, tu copa, tienes que vaciarla y derramar en otros para que el Señor la vuelva a llenar. Si conservas por mucho tiempo ese aceite en tu odre, y no lo usas se echa a perder. Entonces el señor pondrá a otro para que lo ministre.
Pero si usted renueva constantemente ese aceite, siempre tendrá una grata fragancia.  
Si no aplicas y pones en práctica lo que Dios te ha dado, Dios va a levantar a otra persona.
Es tiempo de que te  identifiques.
He visto personas que dicen: ‘yo quiero cantar, danzar’, pero no tienen el don. ¡Amén! Pero usted tiene que concentrase en lo que dios le ha dado, porque en eso Dios sabe que usted se va a desempeñar mejor.
Todo cuanto hacemos es un arte si la hacemos con dedicación y excelencia. Es arte. Nunca debemos menospreciar el talento que Dios ha puesto en  nosotros.
Todo debemos hacerlo con excelencia porque debemos hacerlo para Dios. Debemos mostrarle nuestras cualidades.
No debemos quedarnos sin un lugar.
¡No te quedes en tu lugar!, ¡díselo a tu hermano! Porque por los dones y las artes que Dios te dio, te pedirá cuentas. Te dirá: ¿Qué hiciste con ellos?
Si Dios te dio el don de sanar, de predicar, evangelizar, tocar, ¡úsalo! Hacer un dulce, crear, trabajar con niños… ¡Explótalo!
Hay tanta diversidad de dones y tantas personas estáticas.
Cuando estés en tu casa, solo. Ahí, en el anonimato, Dios te está formando
Cuando el criado habló de David, dijo: “sabe tocar, y es valiente y vigoroso, y hombre de guerra, prudente en sus palabras, y hermoso, y Jehová es con él.”
Ya ahí cambia la cosa. Tú puedes tener un don, un talento, pero si estás frío. Si no estás en la búsqueda de Dios, entonces no sirve de nada.
Muchas personas en el mundo tienen muchos talentos. Músicos espectaculares,  ¿y de qué les sirve?, de nada. Lo principal, que es la relación con Dios, no la tienen.
Debemos ser humildes. Darle el primer lugar a Dios en todas las cosas que hagas y asumas, y él entonces te va a respaldar; y las personas se van a da cuenta.
Usted no va a tener que decir Dios está conmigo. Dios me dio el talento de predicar. Las personas se van a dar cuenta  de lo  que usted tiene, no tendrá que decirlo.
Un siervo debe tener también la unción acompañada de una visión. Acumular y soltar la palabra, predicar el evangelio a toda criatura.
Como cristianos debemos trazarnos un objetivo en los caminos del Señor. Pero tenemos que tener una visión de parte de Dios. Debemos dejarnos guiar por Dios.
El primer mandamiento en la Biblia es claro, amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, mente, alma, fuerza, y a tu prójimo como a ti mismo. Si tú amas a Dios pones lo que él te dio por obra. 
Si tú amas a Dios a ti no hay que obligarle a  hacer nada. Dios no te obliga, Dios es un caballero.
Nuestra voluntad tiene que estar junta con la voluntad de Dios. No dejes que el diablo te ponga cositas en el corazón. Nosotros los cristianos no debemos estar en eso. Hagamos como los gansos. Si mi hermano está decaído, vamos a aletear para que nuestro aleteo, nuestro don, nuestro talento pueda darle ánimo y hacerlo levantar.
Deja que tu don sea el don de Dios. Dios les bendiga en esta noche.
Por Annieris




.




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Datos personales

Mi foto
correo:anaisishr2006@yahoo.es
Plantilla original blogspot modificada por plantillas blog